El Gobierno de España aprobó, en febrero de 2019, el Marco Estratégico de Energía y Clima a través del cual se pondrían en marcha medidas que faciliten el cambio hacia un modelo económico sostenible y competitivo que contribuya a poner freno al cambio climático.
Este Marco Estratégico se estructura en tres pilares:
Los dos primeros elementos del Marco aumentan de manera significativa la ambición climática de España. El tercer elemento, busca maximizar las ganancias sociales de la transformación ecológica y mitigar los impactos negativos de esta transición ecológica articulándose en la Estrategia de Transición Justa.
La Estrategia de Transición Justa impulsa el diseño de políticas industriales, de investigación y desarrollo, de promoción de actividad económica, de empleo y de formación profesional para asegurar que el tránsito hacia un nuevo escenario productivo sea justo y socialmente beneficioso para todos. Se enfoca en maximizar las oportunidades de empleo de la transición hacia un modelo de desarrollo bajo en carbono, siguiendo las directrices de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y las recomendaciones del Acuerdo de París.
Se materializa a través de los Convenios de Transición Justa que recogerán un plan de acción territorial integral para aquellas comarcas donde la transición energética y ecológica pueda suponer dificultades para la actividad económica.
La Ley de Cambio Climático y Transición Energética, aprobada el 20 de mayo de 2021, recoge en su Título V la obligación de aprobar una Estrategia de Transición Justa cada 5 años, un elemento pionero en las Leyes de Cambio Climático en el mundo.